La mayoría de las personas tras el esfuerzo físico diario no nos preocupamos por el estado de nuestros pies. Hay momentos en que los zapatos nos aprietan, a veces salen ampollas o simplemente caminamos tanto que al final del día sólo queremos estirar las piernas y no hacer nada.
Muy pocas veces nos damos cuando de lo rígida que se puso la piel y de cuántas grietas pequeñas tiene, por suerte ese problema es fácil y económico de resolver. Hoy te entregamos una receta que les devolverá a tus pies cansadas su suavidad.
Necesitarás:
- 5 cdas. de bicarbonato de sodio.
- Un poco de gel para ducha.
- Unas gotas de algún aceite esencial (por ejemplo, de lavanda, naranja o limón).
Aplicación
- Antes de empezar el procedimiento, mantén tus pies en agua caliente durante 5 minutos. Esto aumentará la eficiencia del producto.
- Mezcla el gel, el aceite y el bicarbonato para obtener una especie de pasta homogénea. Luego unta la mezcla en la piel de tus pies, masajeándolos al mismo tiempo.
- Si tu piel se tornó demasiado rígida, puedes usar un cepillo o piedra pómez para untar la mezcla.
- Al final del procedimiento, lava los pies con agua y aplica una crema humectante.
El bicarbonato de sodio es un remedios excelente, no sólo para la piel rígida de los pies, sino también para los olores desagradables. Además ayuda a curar pequeñas lesiones y a luchar contra las infecciones por hongos. Los resultados se hacen visibles al cabo de dos semanas.
Esperamos que esta receta te sirva y que la compartas con tus amigos.