Hay enfermedades que comienzan a atacar nuestro organismo sin dar aviso hasta avanzadas etapas de su progreso. Estas enfermedades son llamadas silenciosas y con el paso del tiempo tienen graves consecuencias que no permiten que no permiten que las personas desarrollen una vida normal, pero hay quienes pueden captar ciertas señales que incluso han logrado generar investigaciones científicas.
Joy Milne comenzó a sentir un olor distinto en la piel de su esposo, uno que con el paso del tiempo se hizo mucho más fuerte y ella no sabía a que se debía hasta que un día fue a una organización solidaria donde se ayuda a personas con Parkinson en el Reino Unido y allí supo que ella huele el Parkinson pues las personas expelían el mismo olor que su marido.
Ella describe el olor como parecido al del «almizcle», las secreciones de los animales en el bosque. Cuando su esposo se hizo los examenes el resultado fue que su Parkinson estaba avanzando.
El descubrimiento de Joy ha generado que se realice una investigación en las partículas de la piel de las personas para así captar los signos iniciales del Parkinson. Esto desde que Joy realizó un experimento donde pudo de 12 personas señalar cuales tenían Parkinson y cuales no sólo oliendo una camiseta que las personas habían usado durante todo un día.
Inicialmente esta mujer acertó en 11 de 12 personas, pero más tarde la persona número 12 llamó para decir que le habían diagnosticado la enfermedad.
El Esposo de Joy murió en el 2015, pero esperamos que Joy ayude a las personas a detectar la enfermedad tempranamente para ayudarlos con su calidad de vida.
Comparte el caso de la mujer que huele el Parkinson.
