La nobleza no se demuestra sólo en forma monetaria (por ejemplo, cuando le prestas dinero a un cercano), sino que también puede encontrarse en cosas simples de la vida, como cuando le dices algo simpático a alguien para levantarle el ánimo, o cuando haces un gesto bonito por un desconocido.
Justamente con este objeto fue que la marca de cerveza Budweiser creó un simpático comercial que ha tocado muchas vidas y que -a pesar de no obtener ganancias monetarias- se ha vuelto viral.
Este spot fue producido tras el atentado a las Torres Gemelas, conocido como 9/11, con el fin de rendirle tributo a todos quienes perdieron sus vidas y a quienes sobrevivieron a las víctimas: sus familias y seres más cercanos.
Es un comercial corto, con una gran puesta en escena que no necesita de ninguna palabra para transmitir su mensaje. Es bastante poderosos, y eso se demuestra con la cantidad de veces que ha sido visto: hoy supera los 20 millones de visitas.
En el metraje, se ve a los caballos Clydesdale, icónica imagen de la compañía cervecera, caminando lentamente por las calles de Nueva York, donde ocurrió el atentado. Así, pasan por la Estatua de la Libertad, el Puente de Brooklyn y llegan hasta el parque para poder admirar en toda su belleza el horizonte de la ciudad. Luego, se paran en la zona cero, donde alguna vez estuvieron las Torres gemelas, y bajan sus cabezas conmemorando a las víctimas del trágico atentado.
Budweiser intencionalmente quiso poner al aire este comercial sólo una vez, para no recibir ningún beneficio en ventas al respecto y simplemente rendir tributo a las víctimas.
Mira a continuación este bello comercial:
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