Los asientos del transporte público deben cederse a personas de avanzada edad, embarazadas o discapacitados pues es un símbolo de cultura y educación, pero insultar a alguien pro no ceder su asiento, sobre todo cuando es una anciana y tiene derecho a ocuparlo me parece a lo menos desconsiderado.
La situación que verás a continuación ocurrió en el “tren ligero” de Guadalajara donde un pasajero captó el momento en que un grupo de mujeres discuten con una anciana porque esta no cedió su asiento a una de ellas que estaba embarazada. Ella les asegura que pertenece a al tercera edad mientras las mujeres amenazan con llamar a la policía para verificar que tiene más de 65 años.
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